Hace 15 años, la mayoría de mis amigos no tenían móvil. Yo era de los pocos que usaban. Para localizar a la chica que te ligabas, tenías que llamar a su casa y sufrir la vergüenza de hablar antes con su madre y responder a sus preguntas, ¿Quién eres? ¿Para qué la quieres? Hoy en día, todo el mundo tiene móvil, desde los mayores a los más pequeños. Demasiado pequeños a veces, pero eso es otra historia...
Nos hemos acostumbrado tanto a los móviles, que no concebimos la vida sin ellos. Son parte de nuestra vida y los consideramos imprescindibles. Sin embargo, son un gasto que, en muchos casos, se nos acaba por ir de las manos. ¿Cómo evitar que esto ocurra?
sábado, 27 de diciembre de 2014
jueves, 25 de diciembre de 2014
De vuelta por Navidad
En diciembre de 2010, hace 4 largos años, decidí abrir este modesto blog. La falta de tiempo, de ideas y la inmersión en otros proyectos hicieron que poco a poco dejasse de publicar en él. Sin embargo, nunca me he atrevido a cerrarlo. Era, de alguna manera, como un pequeño sacrilegio, como eliminar algo que creaste con ilusión. Hoy he decidido volver a postear de nuevo. No sé si lo haré diaria, semanal o mensualmente, pero a partir de ahora intentaré plasmar en la pantalla mis pensamientos, mi opinión sobre la vida, la crisis eterna que nos asola y que dicen año tras año que acaba y nunca termina de hacerlo... y algún que otro consejo para salir de ella. Poco a poco cambiaré el diseño y le daré el toque que me gusta. Espero no aburriros, que me sigáis y que aportéis vuestras ideas, críticas y aplausos, si creéis que lo merezco. Re- bienvenidos a mi hogar.
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